El Controversial Contrato de $1.2 Mil Millones de Google con Israel
En una revelación significativa, documentos informados por The New York Times han revelado que los funcionarios de Google tenían preocupaciones sobre posibles violaciones de derechos humanos vinculadas a su contrato de $1.2 mil millones con el gobierno israelí antes de firmar el acuerdo. Las percepciones, extraídas de documentos internos, indican que Google tenía reservas sobre la facilitación de violaciones de derechos humanos relacionadas con las actividades israelíes en Cisjordania.
Preocupaciones Planteadas dentro de Google
Las discusiones internas entre los abogados de Google, el equipo de políticas y consultores externos subrayaron temores de que los servicios de Google Cloud podrían vincular inadvertidamente a la empresa con actividades en Cisjordania. Esta deliberación interna ocurrió meses antes de que el contrato fuera anunciado oficialmente en mayo de 2021, lo que demuestra que Google estaba, al menos en cierta medida, consciente del posible daño reputacional asociado con el proyecto.
Defendiendo el Proyecto Nimbus a Pesar de la Reacción
Desde la firma del acuerdo, Google se ha encontrado en problemas, defendiendo vigorosamente el contrato en medio de protestas de empleados. En una clara posición contra el descontento dentro de su fuerza laboral, la empresa despidió a decenas de empleados que se opusieron al contrato, expresando preocupación por que podría alinearles con la violencia contra los palestinos.
Comprendiendo el Proyecto Nimbus
Denominado Proyecto Nimbus, este contrato permite al gobierno israelí acceder a servicios de nube de Google y Amazon. Notablemente, el Proyecto Nimbus permite la utilización de herramientas de IA para analizar e identificar objetos en imágenes y videos, junto con ofrecer servicios de almacenamiento y análisis para grandes conjuntos de datos. El aspecto financiero del contrato incluía unos anticipados $525 millones del Ministerio de Defensa de Israel, proyectado entre 2021 y 2028.
Implicaciones Financieras y Clientela
Si bien $525 millones es una gota en el océano para Google, que reportó ventas de $258 mil millones en 2021, sigue siendo significativo para reforzar la reputación de Google con otros posibles clientes militares e de inteligencia.
La Posición Oficial de Google
Google ha mantenido que el contrato Nimbus es estrictamente para cargas de trabajo gestionadas a través de su nube comercial, específicamente para ministerios del gobierno israelí. Un portavoz reiteró que estos servicios no se refieren a proyectos altamente sensibles, clasificados o militares vinculados a armas o servicios de inteligencia.
Recomendaciones Internas Ignoradas
Las discusiones internas sobre el contrato revelaron que Google consultó con expertos como Business for Social Responsibility (BSR), quienes aconsejaron en contra de vender o permitir el uso de herramientas de IA al ejército israelí o a otras entidades sensibles. BSR también recomendó que Google realizara la debida diligencia para asegurar que sus servicios no fueran mal utilizados. Sin embargo, parece que el contrato final no incorporó completamente estas sugerencias cruciales.
Riesgos Legales Enfrentados por Google
También surgieron preocupaciones sobre posibles conflictos legales con autoridades internacionales debido a las estipulaciones del contrato. Los documentos internos destacaron riesgos, incluida la posibilidad de enfrentar conflictos con autoridades extranjeras sobre datos israelíes, y la posible necesidad de violar órdenes legales internacionales.
Protestas de Empleados y Respuesta al Conflicto en Curso
A medida que la guerra entre Israel y Hamas se intensificaba, resultando en importantes bajas civiles, Google enfrentó un aumento del escrutinio y las protestas de empleados en contra del Proyecto Nimbus. La situación alcanzó un punto en el que aproximadamente 50 empleados fueron despedidos por su participación en actividades de protesta. El empleado Billy Van Der Laar criticó a la dirección por traicionar el compromiso de la empresa con los principios de IA ética y los derechos humanos.
Conclusión
El contrato del Proyecto Nimbus subraya las complejas relaciones entre los proveedores de tecnología y los contratos gubernamentales, particularmente en regiones políticamente sensibles. A medida que la situación se desarrolla, plantea preguntas fundamentales sobre la responsabilidad corporativa, el uso ético de la IA y la posible complicidad en violaciones de derechos humanos.
Para más información sobre las iniciativas y la ética corporativa de Google, visite la página oficial de Google.
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